jueves, 27 de octubre de 2011

Cuando empieza el frío

Fuera llueve intempestivamente, con viento, de esas tardes que aunque lleves paraguas, te pones hecha una sopa. Y, oh, casualidad, ayer acabé mi mantita de grannies, 180 cuadros que me han llevado unos nueve meses, sin prisa pero sin pausa. Para unirlos, lo he hecho cosiendo, no con ganchillo, que sería lo correcto. Soy una maverick. Con lana negra y cinco colores variados, de esos ovillos acrílicos mega-baratos que venden en el corte para las rebajas. Así que sofá, buena y variada lectura y a estrenarla.
Otra función, ponerla en los pies de la cama

3 comentarios:

Laia dijo...

Así tendrás las piernitas bien calentitas este invierno, jeje.

MJ dijo...

muy chula la manta. Me gusta la combinación de colores

Silks dijo...

Te ha quedado una manta preciosa!!.

Y ahora viene el tiempo de estar calentitas en casa, apetece más que nunca tejer.