domingo, 29 de diciembre de 2013

Por aquí y por allá

Unas cuantas cosas de diferentes disciplinas que he ido haciendo estas semanas atrás:
Unos broches de fieltro con un zorrito durmiendo. El kit para hacerlos venía de regalo en un número de Molly Makes y la verdad es que los hice en un suspiro. Uno, el fucsia, ya se fue con su nueva dueña.
Una mantita faldera con los restos de fingering que tenía, sobrantes de otros proyectos. Sin ningún orden, sin ninguna intención de empezar siempre por el mismo lado para que tuviera derecho y revés, solo tejer hasta que se acabara la lana, dos nudos corredizos juntos y a correr.

Y dos vestidos super sencillos con telas de Liberty:




Y tengo dos cosas más acabadas, pero pendientes de bloqueo. ¿Algún voluntario?

viernes, 15 de noviembre de 2013

Chaquetita

Una chaquetilla que me acabo de hacer inspirándome en este post. No se trata de un patrón para seguir al pie de la letra, sino más bien unas indicaciones generales. La verdad es que me han sido útiles.



 






Detalle de los botones. De cerámica, cada uno diferente y sin lugar a dudas lo más preciado de la pieza:





Deseando que llegue el frío de verdad para ponérmela.
Detalles, aquí.

viernes, 1 de noviembre de 2013

Vacaciones

A mí, la época del año que más me gusta es el otoño: por eso suelo hacer las vacaciones en octubre. Aunque, dadas las circunstancias meteorológicas de los últimos años, vamos a tener que hacer un nuevo planteamiento y dejarlas para más adelante. Este octubre, desde luego, ha tenido más de verano que de otoño. El caso es que ya pasaron las vacaciones y, como dice un amigo mío que es muy optimista, lo bueno de ahora es que tienes todas las del año que viene por hacer. Por lo pronto, las de este se han repartido en dos viajes, muy distintos entre ellos. Una visita de carácter familiar al sur, llena de recuerdos de familia, sobrentendimientos, tranquilidad y buenos alimentos:


















Y otra visita a Londres, que, a pesar de la repetición, nunca decepciona. ¿Cómo va a decepcionar una ciudad en la que, paseando por la calle te encuentras cosas como éstas?




En mi museo favorito, el V&A, me encontré esta maravilla tejida a mano con hilo de algodón:
Este bañador, también tejido:
Y esta extraña y bonita pieza. ¿Para qué sirve? Más abajo, la descripción:

¡Qué práctico, llevar todo el día colgando la labor, bien a mano para cualquier segundo libre!
Y como no podía ser de otro modo, no sólo nos dedicamos a museos (que fueron unos cuantos) sino que también hubo  lugar para las compras.
Lanas (Ni están todas las que son, ni son todas las que están)
Y la ineludible visita a Cath Kidston:

Tejer, poco, la verdad. Entre viaje y viaje, un poco de costura: unas bolsas para labor grandes, en las que quepan cosas de tamaño mediano / grande, las dos con el clásico estampado de flor provenzal aunque en diferente medida.


Y una nueva funda para mi kindle, que la otra ya estaba cochambrosa:
Y ahora, volver al día a día, que, a pesar de que siempre nos quejemos, también tiene sus bondades. Ya sé que va a sonar rarito, pero cada día que madrugo para ir a trabajar, entre las maldiciones del tipo "¿por qué después de 28 años todavía no me he acostumbrado a este horario?", me digo a mí misma: "Qué bien que mi salud de hoy me permite ir a trabajar". 
Y a esperar que el frío haya llegado para quedarse y crecer.


miércoles, 9 de octubre de 2013

Dos piezas

Un chal. Patrón "Los Lirios" de Al-Abrigo. Mi primer Mistery KAL. Silk me lace de Greta and the fibers. Una excelente experiencia.
Detalles, aquí.
Y un cuello de cachemir, también de Greta and the fibers. Suavísimo de tejer, de tal manera que lo que tejas a continuación te parecerá esparto.
Detalles, aquí.


viernes, 27 de septiembre de 2013

¿Otoño? Really?

Según el calendario, el hombre/la mujer del tiempo, los astros y no sé cuántas cosas más, estamos en otoño. Pero hoy, sin ir más lejos, hace una calor en Barcelona de volverse loco. Conforme me voy haciendo mayor (¡ay!) me gusta cada vez más el frío y menos el calor; supongo que tiene mucho que ver el conjunto de piezas que tejo para combatirlo y que quiero lucir. Aunque pensándolo bien, no está nada mal esta temporada en que no hace demasiada calor de día (no como hoy, ese calor-sopa-bochorno de esta ciudad), puedes disfrutar de la playa (septiembre es su mejor mes) y por la noche te echas una mantica por encima. Mirad cómo estaba el mar a principios de semana.
Una piscina, el infierno de los surferos.

Como cada verano, cuando llega a su fin, mi santo y yo nos lanzamos a la montaña en busca de moras para hacer mermelada y otras dulzuras. Este año, la cosecha ha sido más bien pingüe: por un lado, los forestales se han cargado un montón de zarzales para evitar la propagación de posibles fuegos y por otro, el día que fuimos, tenían tomada la montaña los cazadores por "Batuda de senglars" ("Batida de jabalíes") Así que no pudimos adentrarnos mucho por nuestros oráculos moriles por miedo a las escopetas de aquellos seres cargados de sensibilidad, humanidad y un largo etcétera de virtudes. ¿Dónde están los anti-taurinos cuando los necesitas? Aquí os dejo un breve reportaje del día de autos y de parte de los resultados.




Y vamos a la parte tejeril: Un cuello hiper-calentito, con unos ovillos de una bulky dulcísima que compré en Londres hace dos años:

(Sí, debajo del cuello no llevo nada, qué queréis, era el mes de agosto)
Más info, aquí.

Y un gorro de una de esas revistas de "Jane Austen knits". Qué fantásticas, lástima que no hayan sacado más.




Más info, aquí.

Ahora, a esperar que llegue el frío.